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Roberto López-Geissmann.

Aparte de mi familia y mis seres queridos, amo profundamente los paisajes, siendo para mi más valiosos que el oro –principalmente las vistas de lagos y montañas; la frescura, las cabañas de troncos; café, licorcito, pipa y un buen perro; la buena comida y los viajes. Así los libros, películas y el arte de la conversación.

Escribo novela y cuento; soy creativo. Estudié con los Maristas. He sido diplomático, asesor de seguridad, profesor universitario y periodista. Dos carreras universitarias. Me declaro en total orgullo y apoyo de la civilización occidental cristiana. Suelo estar por lo políticamente incorrecto, pero igual lo tradicional como sabiduría. Tengo la firme convicción de que la humanidad ha sido y está siendo atacada por ideas y personas malignas. Debemos protegernos.

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jueves, 19 de septiembre de 2019

EL LIBRO MÁS COMPLETO SOBRE LA AGRESIÓN ARMADA EN EL SALVADOR


EL LIBRO MÁS COMPLETO SOBRE
NUESTRO CONFLICTO ARMADO

Especial para Arcisterio de Roberto López-Geissmann

   Es Perfiles de la Guerra en El Salvador – por el Gral. Div. Juan Orlando Zepeda. Lo leí hace años, demasiado rápido y sin el suficiente análisis, estoy en segunda lectura y me propongo presentar mis comentarios, por entregas en los próximos meses. Es un documento de valor histórico, bien planteado y desarrollado, aunque con una valoración de un pensador serio que une el conocimiento profesional con la experiencia de primera línea del momento histórico de que se trata. Con todo, mis comentarios no serán una explosión de ditirambos, arrebatados entusiasmos, en desmedro de lo que estime justa crítica, disintiendo o agregando en lo que, sin embargo, es un acuerdo general.

PRIMERA ENTREGA
Propósito de estos comentarios e introducción del libro

GENERAL JUAN ORLANDO ZEPEDA

   El libro consta de 322 páginas, dividido en cinco capítulos de diferente longitud. Cuando realice citas del mismo lo haré en color rojo ocre. Omito la historia personal del autor, sus ejecutorias profesionales o sus éxitos individuales. A propósito no he querido entrevistarlo en función de este trabajo. Cualquier contacto no ha tenido ni tendrá que ver a efectos de estas entregas sobre esta obra en particular.
   Me propongo dos cuestiones. Por un lado brindar un apoyo no pedido a un escritor esforzado que ha trabajado arduamente, prestando sus memorias y razonamientos para realizar una obra divulgativa de primera importancia. Lo anterior requiere capacidad y valor. Y me siento hermanado porque él, desde la perspectiva militar e histórica, y este servidor desde la novelística y el ensayo, venimos a coincidir en términos generales en una apreciación similar en lo político filosófico. El General Zepeda lo expresa prístinamente al decir: …que por la falta de escritores realistas, objetivos y equilibrados se ha generado un gran vacío de la realidad nacional, a tal grado que las generaciones jóvenes desconocen la reciente historia patria... Acotando de mi parte que incluso en los gobiernos derechistas se apoyaron obras históricas espurias, cuando no traicioneras, que luego se distribuyeron hasta por las embajadas. La culpa de la derecha todavía no ha sido señalada lo suficiente.
   Precisamente por esta coincidencia creo que ambos hemos gravitado de lo intelectual y literario hacia un deber moral para el Bien Común nacional, siendo que es, por tanto, un aporte indispensable la divulgación de esta obra.

De la Introducción

   Impecables palabras: El Salvador, durante la guerra, se enfrentó a una fuerza revolucionaria cuyos apoyos internacionales, ideológicos y logísticos no tenían límites ni condiciones, esa situación, unida a una campaña propagandística masiva, nacional e internacional, les permitió convertir las incursiones guerrilleras en acciones espectaculares que la prensa extranjera sobredimensionó… Después de 12 años de cruentas luchas, quedó bien claro que las fuerzas guerrilleras no tenían capacidad para derrotar al ejército salvadoreño… Pero no es este el discurso que la más poderosa fuerza de derecha acostumbró hacer cuando el conflicto estaba avanzado e incluso cuando era más claro que nunca que la guerrilla llevaba las de perder –no empatar, sino ser vencida y defenestrada. Si hubiera expresado estas ideas preclaras no hubiese podido hacer la “Paz” que pactó, puesto que realizarla muy cerca del triunfo conlleva ser adjetivado con denominaciones que en el Ejército se pagan con el fusilamiento.
   Tratando de describir este fenómeno llamado Guerra… aparecieron…numerosos libros, panfletos, documentos… y relatos novelescos… casi todas estas obras han inclinado la balanza… hacia las Izquierdas, fomentando la desorientación al interior de la sociedad… cargados siempre de un dogmatismo ideológico y finalmente desfigurando la realidad de los acontecimientos, culpando a la Fuerza Armada y a sus dirigentes… casi siempre dando panoramas desequilibrados… Y no sólo lo que afirman o narran, sino lo que no dicen o dan entender como un acuerdo, por ejemplo, como decíamos, que el “bendito” acuerdo de paz era necesario porque ambas fuerzas estaban casi equilibradas.
   Tocando luego el tema de los Conflictos de Baja Intensidad (CBI) que no es sino la “pareja entrenada para el baile” con la Guerra Popular Prolongada. Y además la aparente ignorancia de los norteamericanos (intragable) del binomio guerra-política, expresada desde mucho por Clausewitz y Sun-Tzu: la política es la guerra por otros medios o al revés, lo que implica ver la Insurgencia, la Guerra de Guerrillas, la eventual Insurrección y otros términos como separados, lo que en el aspecto estratégico militar puede ser completamente fatal, nos dice con claridad el texto en comento:
   La doctrina de CBI no quiere reconocer en sus documentos que la guerra revolucionaria, en su esencia y origen, así como en su conducción estratégica y en su conducción militar es de carácter político… un gran vacío conceptual… que deja a los militares sin autoridad, sin bases filosóficas… he aquí el origen y causa de los errores que cometen los políticos queriendo conducir una guerra. Aunque se ha dicho que la guerra es demasiado seria para dejarla sólo en manos militares, el punto es que no ha existido la amalgama necesaria para conjugar a los buenos profesionales –tanto en capacidades como en ética –que deberían haber hecho causa común en aras a la victoria nacional. Tan claro en esto, continúa: “Toda acción militar debe tener un objetivo político”… Sin embargo, la “despolitización de los militares”… generó amarres y restricciones, limitando en gran medida las iniciativas necesarias que pudieran contrarrestar… las situaciones críticas… “Despolitización” constituye una forma peligrosa y muy costosa de librar una guerra. Diría que es casi un masoquismo criminal de dificultarse la victoria, de la que no hay sustituto, como si un asalto de comandos se realizara con armas y equipos de enorme peso.
   Tratando el tema de que “Para los estrategas norteamericanos existe la convicción… premisa básica…que los problemas económicos y sociales… son los orígenes principales de las insurgencias… Lo que da realidad a la falsa interpretación marxista, por lo que con gran profundidad analítica sigue: Esta teoría, es quizás la interpretación más materialista de la sociedad y desarrollo de los pueblos… Suponer esto como premisa básica es un grave error. Aunque de hecho nuestros hermanos del Norte no se creen del todo esta patraña, si la recetan es realmente en función de un juego de dominó

BATALLÓN DE COMANDOS DEL PRAL


   La introducción también campea como todo un Cid en los elevados conceptos del contenido esencial de lo que es la Guerra Revolucionaria, la que, si no es bien conceptuada puede constituir un equívoco tan grande como el de una brújula que apuntara al sur. Acepta la dificultad, en muchos estrategas, de llegar a la verdadera génesis del problema y la esencia del fenómeno. Jamás nos aproximaremos siquiera si no adjuntamos el verdadero objetivo de toda guerra, que es un objetivo político, y así debe ser peleada. Así, se trata de identificar y definir con claridad la naturaleza del conflicto.
   Es momento que adjuntemos de pasada el más firme rechazo a llamar al Conflicto Armado –más propiamente llamado Agresión Armada –como si fue una Guerra Civil. Esta falsedad nos ha hecho mucho daño y no cumple los requisitos mínimos aceptados por el derecho internacional público para catalogarse como tal. Aceptamos que la ignorancia hable así, pero la Izquierda sabe bien que esa categoría les ayudó enormemente.
   Personalmente, en esos años, tuve una conferencia documentada y estaba dispuesto a presentarme (sólo o acompañado) para esclarecer públicamente ese monstruoso error, que juristas, militares y políticos avezados conocían bien. Estuve con unos y otros, sólo condicioné que se hiciera una respetable publicidad y que fuera en un lugar de primera –no pedía ni un centavo, con el riesgo de perder la vida incluso -, todos dijeron: -¡magnífico! y no hicieron nada. Por esa brecha se coló la Declaración franco-mexicana reconociendo beligerancia a los guerrilleros que no tenían ni números ni territorios, etc.
   Hacia el final, el escritor de “Perfiles”, en absoluta identificación con mi propio sentir afirma: La propaganda, la desinformación sistematizada cotidianamente y sobre todo los análisis inciertos y mentirosos crean percepciones falsas dentro de las sociedades y crean además, un modelo de HOMBRE-MASA, alienado, ciego, que sólo camina para donde los falsos líderes lo empujan como una inmensa masa sin forma hacia cualquier despeñadero.
   Su plan de la obra divide cinco capítulos, que iré comentando. Asi:
1.     Orígenes, causas y motivaciones del conflicto. Organización del FMLN
2.     Estrategia de lucha del FMLN. Evolución y etapas del conflicto.
3.     Estrategia Contrarrevolucionaria. Ppales. hechos y tecnificación.
4.     Crítica de la Negociación y de los Acuerdos de Paz.
5.     Pronósticos y perspectivas para la república, la sociedad y la FFAA.
LA FREGADA QUE ME DIO EL GENERAL ZEPEDA… …

   Pongo este título para llamar la atención. Voy a explicarme… Resulta que siempre había pensado escribir sobre el Conflicto Armado o Guerra de Agresión que sufrimos. Ahora que estaba empezando a ordenarme en consecuencia tengo la oportunidad de ojear este libro que comento y digo:
   -¡Qué locura y qué innecesario pronunciarme! cuando en una enorme proporción de identidad de contenidos, ya todo está escrito y bien escrito, por la eficiencia de un protagonista de primera fila y de primer orden, denso en el arte militar. Así pues no me ha quedado más, para dar mi participación, que la elaboración de unos comentarios detenidos y con citas, sobre esta respetable y rara obra (en su sentido de única en su género). Adicionaré mis acuerdos, opiniones, ampliaciones y demás.
    Misión Cumplida será si al final todas estos comentarios, reflexiones y aportes dieran a luz un folleto relativamente corto en el que difundiendo una clara lección de historia, estrategia y política en apoyo a un autor que estimo y de mente clara y valiente, puedo adicionar algunos conceptos que al mismo tiempo que sirvan de incitación a leer el libro, aporten algo interesante, como acotaciones vertebrales a esta obra singular.

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